Bee Happy: miel y aceite de oliva directamente del campo a la mesa
Miguel y Virginia Montañez, padre e hija, son las personas que están detrás de Bee Happy, una pequeña tienda de Málaga que lleva un año y medio trabajando duro por un consumo natural y local. La familia Montañez siempre ha estado dedicada a la agricultura, primero a través de los olivos y hace 7 años se embarcaron en el mundo de la apicultura. “Somos productores de aceite de oliva y de miel y pensamos que podíamos ser nosotros mismos también los que vendiéramos nuestros productos. Hemos eliminado cualquier intermediario, directamente del campo al consumidor”, nos cuenta Virginia. Esto se sumó a otra idea que llevaba tiempo rondándole la cabeza: la de recuperar los hábitos de compra de nuestras madres y abuelas. “Me di cuenta de que no me gustaba la manera de consumir y vivir en la que me estaba metiendo, siempre con prisa, el usar y tirar, el consumo descontrolado… con Bee Happy podíamos dar una alternativa a las personas que se encontraran en la misma situación”.
En Bee Happy se han especializado en la venta de productos de origen natural, además de la miel y el aceite de oliva de producción propia, también de todo aquello que provenga de estas materias primas. “Vamos incorporando nuevas productos poco a poco. Para nosotros es muy importante sentirnos identificados con las marcas que tenemos en la tienda y buscamos que tengan esa conexión con nuestras raíces”. Así es como Virginia se enamoró de los productos de Matarrania, primero por su origen e ingredientes y luego por sus efectos en la piel. “Que la cosmética de MATARRANIA gire en torno al aceite de oliva fue uno de los puntos más importantes para nosotros, es maravilloso ver cómo de las mismas raíces nacen productos tan espectaculares”. Virginia, después de probar algunos productos de la marca, decidió que tenía que llevarlo a su tienda y que sus clientas también lo probaran. “Me quedé tan encantada con los resultados que pensé: esto lo tengo que compartir”, bromea Virginia.
El producto estrella de Matarrania entre sus clientes es el Tónico regenerador para piel madura, aunque casi toda la gama ha tenido muy buena aceptación. “Lo que más me ha sorprendido es que la cosmética ya no está enfocada solo en mujeres. A la tienda cada vez vienen más hombres que buscan cuidarse la piel” apunta la propietaria.
Después de este primer año y medio de aventura, Bee Happy quiere dar el salto a la venta online. Van a mantener su esencia local, con venta física y la distribución de sus productos a otros comercios de Málaga, pero han detectado que los demandan desde otras partes de España. Bee Happy crece despacio pero con buena letra, dando cada paso acorde el estilo de vida que quieren poner de moda: el natural. “Bee Happy es el reflejo de nuestra forma de vida, el campo, lo natural y la sencillez”. Estamos seguras de que lo conseguirán ya que tienen los ingredientes esenciales para triunfar.