El salto al champú natural

El uso de un champú natural es altamente beneficioso para la piel y para nuestro organismo, al que le evitamos la asimilación de sustancias nocivas que, con el uso frecuente, pueden llegar a tener consecuencias más o menos graves en nuestra salud. Por tanto es una decisión muy acertada, pero que conlleva un pequeño sacrificio que no todos llevan con la misma alegría.

Cuando se empieza a utilizar un champú bio nuestra piel sufre un proceso de adaptación. El cuero cabelludo por naturaleza se mantiene nutrido y sano gracias a la producción natural de sebo, pero el uso de champús y otros productos de cuidado capilar con ingredientes químicos arrasan con esa defensa natural, reduciendo la producción de sebo y taponando los poros. Se consigue de esta manera una falsa sensación de limpieza y suavidad, pero también la necesidad de utilizar cantidad de ingredientes hidratantes porque nuestra piel por sí misma va perdiendo la capacidad natural de mantenerse hidratada.

Por ese motivo la piel, al dejar de usar esos productos, se siente indefensa y no sabe cómo actuar. Las glándulas sebáceas han permanecido durante mucho tiempo cerradas y sin producir sebo, por lo que se tarda en recuperar el proceso de producción natural. En ese tiempo el cuero cabelludo se ve carente tanto de la hidratación falsa de los productos químicos como de la hidratación natural que aún no es capaz de generar, por tanto el cabello se muestra seco, apelmazado y sin brillo.

Ese proceso puede durar una o dos semanas, o incluso más si el pelo se ha visto muy expuesto a sustancias nocivas. Hay veces que incluso un corte de pelo ayuda a recuperar antes ese aspecto sano que le corresponde por naturaleza. Puede resultar un periodo de adaptación incómodo en algunas situaciones, pero sus resultados son tan espectaculares y duraderos que merece la pena. 

Consejos para utilizar el Champú Sólido 100% Bio de MATARRANIA:

- Enjabónate dos veces usando la cantidad justa de jabón.

- Aclárate muy bien el cabello con abundante agua.

- Si usas mucho jabón te costará más aclararlo y te pueden quedar restos.

Os animamos a probarlo y a contarnos después qué tal ha sido vuestra experiencia.